6 prácticas sexuales para romper la rutina

Por Carlos López · 12 Aug 2025 – 02:44 AM -03 Ver perfil
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Redescubrir la intimidad: un viaje hacia el placer sin límites
La sexualidad es un universo vasto y multifacético, donde cada pareja puede encontrar su propio camino hacia el placer. Sin embargo, muchas veces la rutina se infiltra en la intimidad, haciendo que las experiencias se sientan monótonas y predecibles. Esto no solo afecta a los individuos involucrados, sino que puede influir en la calidad de la relación en su conjunto. La psicóloga y sexóloga Mariana Kersz, experta en el tema, propone una serie de prácticas que pueden ayudarnos a revitalizar nuestras experiencias sexuales, fortaleciendo la conexión con nuestra pareja y promoviendo el goce mutuo.
Explorando nuevas sensaciones con el toque adecuado
Una de las propuestas más intrigantes de Kersz es la práctica de las cosquillas eróticas. Consiste en usar la yema de los dedos para crear un juego de sensaciones que se va intensificando. El objetivo es generar una tensión sexual que despierte el deseo. Puedes incorporar elementos diversos como plumas, algodoncitos o cintas, ampliando el catálogo de sensaciones. La clave está en experimentar y observar las reacciones de tu pareja, lo que añade un componente de juego y complicidad.
Además, existe una práctica que puede cambiar por completo la percepción del placer: las contracciones de Kegel. Imagina que dentro de tu vagina hay un pequeño objeto que debes sostener. Este ejercicio no solo fortalece los músculos del suelo pélvico, sino que, cuando se realiza con el pene de tu pareja dentro, genera una sensación similar a una succión suave, evocando la experiencia del sexo oral. Lo curioso es que también se le conoce como el abrazo de Singapur. Experimentar esta técnica puede abrir nuevas puertas al orgasmo, tanto para ti como para tu pareja.
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La autoconocimiento como clave del placer compartido
La exploración del propio cuerpo es fundamental en la búsqueda del placer. Conocerte a ti mismo y entender lo que te excita resulta esencial para poder guiar a tu pareja. El fingering, que consiste en jugar con los dedos en tu cuerpo y el de tu pareja, es una forma efectiva de explorar nuevas zonas erógenas. Esta práctica no solo promueve un acercamiento físico, sino también uno emocional, permitiendo que ambos se sientan más conectados y cómodos en su intimidad.
Es importante recordar que la comunicación es un pilar fundamental en cualquier relación sexual. Compartir lo que te gusta y lo que no, las sensaciones que deseas experimentar y tus límites, fomenta un espacio de confianza y apertura. La práctica del fingering puede ser una oportunidad para hablar sobre preferencias, deseos ocultos y fantasías, enriqueciendo la vida sexual de ambos.
Incorporando juegos y elementos innovadores
Otro enfoque para revivir la pasión es la implementación de juegos de roles o el uso de juguetes sexuales. Estas herramientas pueden parecer intimidantes al principio, pero pueden añadir una chispa significativa a la intimidad. Los juguetes sexuales, que han ganado popularidad en los últimos años, no solo son una fuente de placer, sino que también pueden ayudar a las parejas a descubrir nuevas formas de conectarse. Desde vibradores hasta anillos para el pene, las opciones son variadas y adecuadas para todo tipo de preferencias.
Por otro lado, el juego de roles permite a las parejas explorar facetas de su personalidad que quizás no se atrevan a mostrar en su vida cotidiana. Este tipo de práctica puede ser liberadora y contribuir a la creación de una atmósfera de diversión y exploración. Al final, lo que importa es el deseo de experimentar y de salir de la zona de confort.
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El poder de la intimidad emocional en la sexualidad
Finalmente, no debemos subestimar la importancia de la conexión emocional en la experiencia sexual. Crear un ambiente propicio para el amor y el deseo es esencial para romper con la rutina. Esto puede incluir desde una cena romántica, hasta el simple acto de mantener una conversación profunda sobre sus expectativas y sueños como pareja.
El simple hecho de dedicar tiempo a fortalecer la relación emocional puede ser el cambio que necesitas para reavivar la pasión. Aprender a escuchar y entender las necesidades de tu pareja, así como compartir las tuyas, puede transformar la forma en que perciben y disfrutan el sexo.