Exterminio La evolución o los sobrevivientes del COVID: continúa la saga de horror

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Por Ana Martínez · 19 Jun 2025 – 06:31 AM -03 Ver perfil

El Regreso del Horror: Entre el Virus y la Resiliencia La saga de terror del director Danny Boyle regresa con una nueva ... Descubre más sobre extiende, acce...

Foto: Zuma Press | © 2025 InfoNow Noticias

El Regreso del Horror: Entre el Virus y la Resiliencia

La saga de terror del director Danny Boyle regresa con una nueva entrega que profundiza en la angustia y el horror del contagio, en un momento histórico donde la pandemia de COVID-19 ha puesto a prueba nuestra resistencia. Con Exterminio: La evolución, el cineasta británico no solo revive su visión distópica, sino que también ofrece un espejo perturbador de nuestra realidad contemporánea, afectando a una sociedad que aún lucha con las secuelas del virus.

Una Continuación Intrigante

Con un enfoque innovador, Boyle vuelve a un mundo donde el virus ha transformado a muchos en seres más violentos, evocando el miedo a lo desconocido. La primera entrega, estrenada en 2002, marcó un antes y un después en el género de horror, en una época donde los zombies parecían relegados a un segundo plano. En esta nueva película, la narrativa toma un giro significativo al plantear la supervivencia no solo de los infectados, sino de aquellos que han logrado resistir las embestidas del virus.

Alex Garland, guionista de la primera entrega y de esta última, enfatiza que los infectados no son zombies convencionales; el virus de la rabia ha elevado su agresividad sin quitarles la vida. Este matiz crucial extiende el horror más allá del simple hecho de un ataque, señalando un strato emocional que resuena con quienes han enfrentado el COVID-19.

Papá, el hijo y los infectados: a correr.

Crédito: Agence France-Presse – Imagen exclusiva | © 2025 InfoNow Noticias

La Trama y su Contexto

La narrativa de Exterminio: La evolución se sitúa en Holy Island, un paraje rural que contrasta con la urbanidad de las dos entregas anteriores. Al transcurrir 28 años desde el inicio del contagio, los sobrevivientes han desarrollado un estilo de vida precario, siempre al borde del colapso. La isla, que solo es accesible durante la marea baja, se convierte en un microcosmos donde los peligros del virus se entrelazan con la naturaleza salvaje, reflejando la lucha diaria de una comunidad que ha sido forzada a adaptarse a su nueva realidad.

La nueva entrega no solo narra las peripecias de los sobrevivientes, sino que también permite una profunda reflexión sobre la resiliencia humana. La comunidad de Holy Island debe enfrentar sus propios demonios internos y externos, donde el verdadero horror reside en la lucha por la supervivencia y los dilemas éticos que surgen en situaciones extremas.

Un Impacto Cultural y Social

El resurgir de esta franquicia plantea múltiples interrogantes sobre la representación del horror en el cine contemporáneo. La relación entre el virus ficticio de la saga y el COVID-19 en la vida real es innegable. En un mundo donde la desinformación y el miedo han reinado, la obra de Boyle puede interpretarse como una crítica a la forma en que la sociedad ha manejado la crisis sanitaria.

En Argentina, donde la pandemia tuvo un impacto devastador y cuyas secuelas aún se sienten, el filme puede resonar de manera particular. La lucha contra el virus ha revelado la fortaleza y vulnerabilidad de la sociedad argentina, planteando interrogantes sobre la forma en que se ha enfrentado la adversidad. Así, la película se convierte en un vehículo para la reflexión sobre la responsabilidad social y el individualismo en tiempos de crisis.

Los infectados con el virus de la rabia no son zombies, porque no murieron...

Imagen: Alamy | Archivo | © 2025 InfoNow Noticias

Reflexiones sobre la Violencia y la Supervivencia

La evolución de los personajes en este nuevo capítulo nos invita a reflexionar sobre cómo el miedo y la violencia pueden distorsionar la humanidad. A medida que los sobrevivientes luchan contra la amenaza de los infectados, también deben confrontar sus propios miedos y prejuicios. Este dilema se asemeja a la experiencia de aquellos que, tras meses de confinamiento y estrés, deben reintegrarse a una sociedad donde las heridas aún no han sanado.

El horror que presenta Boyle en su película no es solo físico, sino también psicológico, lo que nos lleva a cuestionar cuán lejos estaríamos dispuestos a llegar para proteger a nuestros seres queridos. La cinta, en su esencia, nos ofrece un espejo de nuestras propias luchas internas, resaltando que la verdadera batalla no solo es contra el virus, sino contra la desesperación y la pérdida de nuestra humanidad en un mundo que a menudo parece caótico e impredecible.

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