Por qué tu pareja evita la intimidad, según especialistas
Por Carlos López · 24 Jun 2025 – 02:36 AM -03 Ver perfil
Crédito: Corbis – Imagen exclusiva | © 2025 InfoNow Noticias
La distancia emocional y sus múltiples facetas
En el complejo entramado de las relaciones de pareja, la intimidad se erige como uno de los pilares fundamentales. Sin embargo, el fenómeno de la evitación de la cercanía sexual se ha convertido en un tema recurrente entre los consultorios de terapeutas y sexólogos. Según un estudio reciente publicado en Archives of Sexual Behavior, cerca del 35% de las parejas experimentan períodos de baja o nula intimidad, lo que plantea un desafío emocional para quienes se ven afectados.
El impacto del entorno en la vida sexual
En una sociedad que ha normalizado el acceso al contenido sexual a través de plataformas digitales, el valor de la intimidad física se ha visto cuestionado. Valérie Tasso, reconocida sexóloga, señala que existen múltiples factores que pueden contribuir a que una persona evite el contacto físico. La saturación de estímulos sexuales en línea puede llevar a la desensibilización, donde lo virtual sustituya a lo real.
Además, la presión social y las expectativas culturales también juegan un papel importante. En contextos donde la productividad y el rendimiento son valorados por encima de las relaciones personales, las parejas podrían verse atrapadas en un ciclo de estrés que les impide disfrutar de la intimidad. La psicóloga Isabel Aranda refuerza esta idea, recordando que las preocupaciones cotidianas pueden eclipsar la conexión emocional necesaria para el deseo sexual.
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Causas emocionales y psicológicas de la evitación
Las emociones reprimidas o los conflictos no resueltos pueden ser catalizadores en la pérdida de interés por la intimidad. En muchas ocasiones, los problemas de comunicación entre las parejas generan distanciamiento. Aranda sugiere que es esencial abordar estos conflictos directamente, ya que la falta de diálogo puede llevar a malentendidos y resentimientos.
- Ansiedad y depresión: Estas condiciones pueden afectar drásticamente el deseo sexual y la intimidad.
- Inseguridades personales: La autoestima disminuida puede llevar a la evasión del contacto físico.
- Experiencias traumáticas: Antecedentes de abuso o trauma pueden afectar la percepción de la intimidad.
El papel de la rutina y el tiempo
La monotonía puede ser un enemigo silencioso en las relaciones. La rutina diaria, el trabajo y las responsabilidades familiares suelen dejar poco espacio para la creatividad y la conexión emocional. Tasso sugiere que es crucial que las parejas se esfuercen por mantener la chispa viva, explorando nuevas formas de conexión y comunicación.
Además, es importante tener en cuenta la llegada de la madurez en las relaciones. La pérdida del deseo puede ser particularmente evidente en parejas de larga data, donde la falta de novedad se traduce en una disminución del interés sexual. La clave aquí es la adaptación, la disposición a reinventar la relación y la capacidad de reconocer que las fases de intimidad pueden fluctuar a lo largo del tiempo.
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La búsqueda de soluciones efectivas
Para enfrentar esta situación, los especialistas recomiendan estrategias que enfatizan la comunicación y el entendimiento mutuo. La terapia de pareja puede ofrecer un espacio seguro para que ambos miembros expresen sus necesidades y preocupaciones. Aranda también sugiere ejercicios de conexión emocional que pueden ayudar a restablecer el vínculo afectivo.
Además, la exploración de nuevas experiencias juntos, desde actividades recreativas hasta la práctica de la atención plena, puede revitalizar la relación. En lugares como Argentina, donde las relaciones humanas son valoradas, adoptar un enfoque proactivo para fomentar la intimidad es fundamental.
En conclusión, la evasión de la intimidad puede ser un fenómeno complejo y multifacético, pero es crucial recordar que es parte de un ciclo natural en las relaciones. Abordar las causas subyacentes con empatía y disposición para entenderse mutuamente puede ser el primer paso hacia una conexión renovada y satisfactoria.
