Lo que la Inteligencia Artificial, ese “cerebro externalizado”, pone en juego en la Historia
Por Juan Pérez · 05 Aug 2025 – 01:16 AM -03 Ver perfil
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La revolución digital y su impacto en el trabajo del historiador
En un mundo cada vez más marcado por la digitalización, la Inteligencia Artificial se alza como un protagonista indiscutible en la forma en que se investiga y se comprende la Historia. Este fenómeno no solo está transformando el trabajo de académicos e investigadores, sino que también está redefiniendo los métodos de acceso a la información histórica para una audiencia global ávida de conocimiento.
Acceso sin precedentes a fuentes históricas
La era digital ha permitido un acceso sin precedentes a una vasta cantidad de fuentes históricas. Gracias a la digitalización, obras que antes solo podían ser consultadas en bibliotecas específicas o en condiciones costosas ahora están disponibles para cualquier persona con conexión a internet. Archivos como la Gaceta de Buenos Ayres y documentos históricos de distintas partes del mundo son accesibles con un simple clic.
La labor del historiador, que antes podía requerir meses de búsqueda física y económica, se ha transformado en un proceso que se puede realizar en cuestión de minutos. ¿Cómo afecta esto a la forma en que interpretamos la Historia? Los investigadores ahora pueden comparar textos y contextos en un abrir y cerrar de ojos, facilitando un análisis más profundo y crítico.
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La asistencia de la IA en la lectura de manuscritos
A medida que avanzamos en el uso de tecnologías avanzadas, uno de los cambios más significativos ha sido la incorporación de herramientas de reconocimiento óptico de caracteres (OCR). Este avance nos permite escanear y digitalizar textos manuscritos, haciendo posible buscar términos específicos en documentos que antes requerían una lectura exhaustiva. Hoy tenemos la capacidad de acceder a documentos antiguos a través de plataformas como FamilySearch, donde se han digitalizado registros parroquiales y otros textos cruciales para la investigación genealógica y social.
Sin embargo, surge una pregunta apasionante: ¿Podría la IA llegar a sustituir la lectura humana de estos documentos? Si bien la tecnología facilita el proceso, la interpretación y contextualización de la información aún requieren el juicio crítico del historiador, quien debe discernir la relevancia de cada fragmento en un marco más amplio.
Un cambio en el rol del historiador
No se puede negar que la Inteligencia Artificial está cambiando el rol del historiador. Se está pasando de ser meros recopiladores de datos a convertirse en curadores de información. Lo que antes era una búsqueda ardua de fuentes, ahora se convierte en un proceso más estratégico, donde el historiador selecciona e interpreta la información a partir de grandes volúmenes de datos.
Este cambio también plantea desafíos éticos. La posibilidad de acceder a grandes cantidades de información puede llevar a la sobreabundancia de datos y a la desinformación. La capacidad crítica del historiador es más esencial que nunca, especialmente en un contexto en que Argentina y el mundo enfrentan desafíos políticos y sociales que redefinen su narrativa histórica.
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Perspectivas futuras en la investigación histórica
Mirando hacia el futuro, el uso de la Inteligencia Artificial en la investigación histórica promete revolucionar aún más nuestra comprensión del pasado. Las herramientas de análisis de datos y la minería de textos permiten identificar patrones y conexiones que previamente podían pasar desapercibidos. Por ejemplo, mediante el análisis de grandes volúmenes de textos, los historiadores pueden rastrear la evolución de ideas y movimientos sociales de forma más compleja y matizada.
A pesar de las ventajas, es crucial mantener un enfoque crítico. La interpretación de datos asistida por IA no debe sustituir la labor del pensamiento crítico y la reflexión histórica. En un contexto donde la memoria colectiva es objeto de debate, es fundamental que los historiadores se comprometan a utilizar estas herramientas de manera ética y responsable, siempre cuestionando y analizando los datos que se presentan.