“Burro, basura y corrupto”: fuerte cruce de Luis Caputo a Wado de Pedro por el préstamo del FMI que tomó Macri
Por María Gómez · 20 Jun 2025 – 04:51 PM -03 Ver perfil
Foto: Télam | © 2025 InfoNow Noticias
Un enfrentamiento cargado de acusaciones: Caputo contra De Pedro
En el actual panorama político argentino, las tensiones entre los diferentes sectores continúan marcando la agenda. En esta ocasión, el conflicto se intensificó entre el ministro de Economía Luis Caputo y el exministro del Interior Wado de Pedro, quien ahora es senador de Unión por la Patria. Este intercambio de acusaciones no solo revela las diferencias ideológicas entre las partes, sino que también pone en la mira el polémico préstamo otorgado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) durante la presidencia de Mauricio Macri.
El cruce de acusaciones
La contienda se inició cuando Wado de Pedro citó una entrevista con Máximo Kirchner en su cuenta de X, cuestionando la legitimidad del crédito del FMI tomado por el gobierno de Macri. En su publicación, De Pedro sugirió que los fondos que se recibieron del FMI habrían sido más que suficientes para financiar entre el 40% y 50% del gasoducto que se proyecta construir para exportar gas desde los yacimientos de Vaca Muerta. La crítica se centra en que, en lugar de destinar esos recursos a proyectos de infraestructura, el dinero se usó para cubrir gastos corrientes, sin un rédito claro para la economía argentina.
La respuesta de Luis Caputo no se hizo esperar. En un tono beligerante, calificó al kirchnerismo de “burro”, “basura” y “corrupto”, descalificando las acusaciones de De Pedro. Esta retórica incendiaria no solo refleja el agitado clima político, sino también un intento de desviar la atención hacia cuestiones más profundas sobre la gestión económica durante el mandato de Macri y las políticas implementadas por el kirchnerismo en el pasado.
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Un análisis del préstamo del FMI
El préstamo del FMI durante la administración de Macri, que ascendió a aproximadamente 57.000 millones de dólares, se convirtió en un tema álgido en el discurso político argentino. Al examinar los detalles, es fundamental considerar:
- Montos recibidos: La Argentina recibió desembolsos que se utilizaron en su mayoría para cubrir déficits fiscales.
- Condiciones del préstamo: El FMI impuso condiciones que muchos críticos afirman llevaron a recortes en áreas esenciales como salud y educación.
- Impacto en la deuda: El préstamo ha contribuido significativamente al aumento de la deuda externa argentina, lo que ha generado reproches tanto en la oposición como en el oficialismo.
Esta situación ha dejado un legado complicado, y las críticas hacia la gestión de Macri se centran en cómo se manejaron esos recursos y a dónde fueron a parar.
La respuesta de la oposición
El enfrentamiento no es solo un episodio aislado. Refleja una estrategia más amplia del kirchnerismo y de sus aliados para consolidar una narrativa en torno a la gestión económica de Macri y, por ende, de Caputo. En este sentido, Wado de Pedro se ha convertido en una voz clave para exponer las supuestas falencias en el uso de los recursos del FMI, argumentando que el gobierno actual podría haber utilizado esos mismos fondos para llevar adelante proyectos de desarrollo cruciales.
La insistencia de De Pedro en que “ni uno de esos dólares fue a parar en algo útil para los argentinos” tiene un eco poderoso en un contexto donde la población enfrenta problemas económicos agudos, como la inflación y la pobreza. Este tipo de mensajes resuena especialmente en un electorado que busca alternativas y soluciones concretas.
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Un futuro incierto
La declaración de Caputo, “No van a volver nunca más”, sugiere una confianza en la resistencia del actual poder político frente a las críticas de sus antecesores. Sin embargo, este tipo de afirmaciones también puede percibirse como un intento de minimizar la relevancia de las críticas y de la memoria colectiva sobre el pasado. En un país donde las heridas del pasado son aún frescas, cada declaración, cada reproche, se convierte en un arma de doble filo.
En este contexto, la disputa entre Caputo y De Pedro es un reflejo de un conflicto más profundo que afecta no solo a los actores políticos, sino a la sociedad argentina en su conjunto. La forma en que estos debates se desarrollan puede influir en el futuro político y económico del país, como también en la percepción pública sobre la capacidad del gobierno para abordar los desafíos que enfrenta.