De los mensajes a Messi a la foto soñada: la primera vez inolvidable de Troilo en la Selección
La llegada de un joven talento al escenario mayor del fútbol argentino
El fútbol argentino siempre ha sido un crisol de talentos, y la reciente convocatoria de Mariano Troilo para la Selección Nacional es un ejemplo más de ello. Este defensor central de 21 años, quien ha brillado en el Club Atlético Belgrano, se encuentra en un momento decisivo de su carrera, donde la presión y la expectativa se entrelazan con la emoción y la alegría. Su experiencia en la selección no solo marca un hito en su trayectoria, sino que también refleja la promesa de un futuro brillante en el deporte.
Un paso significativo en la carrera de Troilo
Con 51 partidos jugados y dos goles marcados en la Primera División desde su debut en 2023, Troilo ha demostrado ser una pieza clave en el esquema de su club. Esta convocatoria a las Eliminatorias no fue solo otra cita en su carrera, sino un verdadero reconocimiento a su esfuerzo y dedicación.
El joven defensor expresó su felicidad al integrarse a un equipo lleno de estrellas, afirmando: “Un orgullo enorme. Muy contento de poder compartir esto con todos ellos, fue una alegría hermosa”. Estas palabras no solo reflejan su humildad, sino también la admiración que siente por sus compañeros, algunos de los cuales son leyendas vivas del fútbol mundial.
El legado de los grandes: comparaciones inevitables
Hablar de Mariano Troilo sin mencionar a Cristian Romero sería casi un sacrilegio. Ambos defensores comparten un recorrido similar, habiendo emergido del mismo semillero y ocupando posiciones similares en la cancha. La convocatoria de Troilo ha traído a la mente de los aficionados la sorpresa que generó la llamada de Romero en su momento.
Troilo, al respecto, no duda en reconocer la influencia de Romero en su adaptación al grupo: “El Cuti me apadrinó”. Este respaldo no solo le brindó confianza, sino que también le permitió abrirse a experiencias que marcan la vida de un futbolista. La conexión entre los dos jugadores es un testimonio del trabajo en equipo y la camaradería que se forja en el vestuario de la selección.
Un momento para recordar: la foto con Messi
Uno de los momentos más entrañables de esta experiencia fue cuando Troilo tuvo la oportunidad de conocer a Lionel Messi. A pesar de ser un jugador de élite, el joven defensor confesó que sentía un poco de vergüenza al acercarse a la leyenda del fútbol. Sin embargo, fue el propio Cuti quien lo animó a pedirle una foto, lo que resultó en una escena memorable: “El último día pude pedirle una foto a Leo personalmente, por ahí me daba un poco de avergüenzo y me empujo el Cuti para pedirle la foto”.
Este tipo de anécdotas son las que hacen del fútbol un espectáculo tan humano y cercano. La imagen de Troilo junto a Messi captura no solo la admiración de un joven futbolista hacia su ídolo, sino también la cercanía y el compañerismo que caracterizan a la selección argentina.
Recuerdos de juventud y el camino hacia el futuro
La historia de Troilo no solo se define por su reciente llamado a la selección, sino también por sus memorias de infancia. Al compartir su anécdota sobre los mensajes que le enviaba a Messi cuando era niño, se destaca el fervor y la pasión que ha tenido por el fútbol desde una edad temprana. “Le mandé mensajes por Instagram cuando era chico”, recordó entre risas. Mostrarle estos mensajes a Messi, en un ambiente distendido, se convirtió en un momento de complicidad que resonó en el vestuario.
La mezcla de emociones y experiencias que ha vivido Troilo en estos días es un indicativo de que, aunque su carrera apenas comienza, está en el camino correcto. La combinación de talento, trabajo duro y un entorno que lo respalda parece ser la fórmula ideal para que este joven defensor continúe progresando y se afirme en el panorama futbolístico argentino.
