Doce años después del accidente, un shopping porteño deberá indemnizar a una mujer que se cayó de una escalera mecánica
Por María Gómez · 25 Jun 2025 – 02:35 PM -03 Ver perfil
Foto: Polaris | © 2025 InfoNow Noticias
Un fallo trascendental sobre la responsabilidad en espacios públicos
El reciente fallo de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil ha puesto en el centro de la atención judicial la responsabilidad de las instituciones comerciales en la seguridad de sus instalaciones. En este caso, la mujer afectada por una caída en una escalera mecánica del shopping Patio Bullrich ha visto reconocidos sus derechos después de más de una década de espera, marcando un precedente en las relaciones de consumo y la protección al consumidor en Argentina.
Detalles del incidente y su impacto a lo largo del tiempo
El accidente ocurrió hace exactamente doce años, cuando la demandante, mientras disfrutaba de una tarde de compras, sufrió un “cimbronazo” que la hizo caer de una escalera mecánica. Este incidente no solo afectó su salud física, sino que también la llevó a una larga batalla legal que se extendió por años. El hecho de que el fallo haya llegado recién en 2023 resalta las complicaciones del sistema judicial argentino y la importancia de la perseverancia en la búsqueda de justicia.
La decisión de la Cámara se basó en la existencia de una relación de consumo, un aspecto crucial que permitió a la demandante obtener una indemnización. Aunque la empresa y su aseguradora intentaron argumentar que la presencia de la mujer en el shopping no constituía un vínculo, el tribunal determinó lo contrario, reafirmando que la seguridad en estos espacios debe ser garantizada independientemente de si se realiza una compra.
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Las implicaciones económicas del fallo
El fallo inicial, emitido el 8 de septiembre de 2023, estableció una indemnización de $ 3.244.700 para la mujer, que incluía no solo el daño físico, sino también los costos de tratamiento kinesiológico. Sin embargo, tras la apelación, la Cámara elevó la cifra total a $ 3.680.000. Este ajuste representa un reconocimiento de la magnitud del daño sufrido y de los gastos futuros que puede implicar para la víctima. Estas cifras reflejan una realidad económica en la que las empresas deben ser responsables de su infraestructura y la seguridad de los consumidores.
- Indemnización inicial: $ 3.244.700
- Indemnización final: $ 3.680.000
- Fecha del fallo inicial: 8 de septiembre de 2023
Un precedente en la protección del consumidor
Este caso no solo es relevante por el monto de la indemnización, sino porque establece un precedente importante en la jurisprudencia argentina en relación con los derechos de los consumidores. La idea de que el consumidor tiene derechos incluso sin haber realizado una compra es un concepto que podría reformular la manera en que las empresas gestionan la seguridad de sus espacios públicos. Como sociedad, es fundamental reflexionar sobre cómo garantizamos la seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos en estos entornos.
La decisión de la justicia también se alinea con un contexto más amplio en el que las empresas deben adaptarse a una normativa cada vez más estricta en materia de seguridad y salud pública. Este tipo de fallos puede incentivar a otros centros comerciales y empresas a revisar sus protocolos de seguridad, no solo para proteger a sus clientes, sino también para evitar complicaciones legales que pueden resultar costosas.
El contexto social y judicial en Argentina
En un país donde los procesos judiciales suelen llevar años, este caso es una luz al final del túnel para muchas víctimas que esperan justicia. La lentitud del sistema judicial argentino ha sido objeto de críticas constantes; sin embargo, decisiones como esta podrían ser un indicativo de que, poco a poco, se están dando pasos hacia un cambio necesario. En un contexto donde la política y la economía luchan por encontrar estabilidad, este tipo de fallos se convierten en un símbolo de que la ley puede y debe proteger a quienes se ven vulnerados.
En conclusión, el caso de la mujer que se cayó en el Patio Bullrich es un claro recordatorio de que la justicia, aunque a veces lenta, puede prevalecer. Este fallo no solo beneficia a la víctima, sino que también envía un mensaje a las empresas sobre la importancia de la responsabilidad social y la necesidad de garantizar la seguridad en sus instalaciones. La protección al consumidor no es solo una cuestión legal; es un compromiso moral que debe ser asumido por todos los actores en la sociedad.