El FMI apoya hasta octubre, la inquietud de la UIA y Luis Caputo en sus días más difíciles
Por María Gómez · 26 Jun 2025 – 11:33 PM -03 Ver perfil
Crédito: AP – Imagen exclusiva | © 2025 InfoNow Noticias
El respaldo silencioso del FMI ante un escenario electoral incierto
En medio de un clima político tenso y lleno de incertidumbres, el Fondo Monetario Internacional (FMI) ha decidido adoptar una postura de apoyo tácito hacia el gobierno argentino hasta las elecciones de octubre. Este movimiento, que lleva la firma de la jefa del Fondo, Kristalina Georgieva, se traduce en una serie de decisiones que no solo afectan la economía nacional, sino que también impactan la próxima contienda electoral, donde Javier Milei busca consolidar su posición.
El FMI y la estrategia de “siga, siga”
La decisión de no hacer reclamos inmediatos sobre el cumplimiento del programa económico establecido entre el FMI y Argentina tiene un claro objetivo: garantizar la estabilidad política y económica en los meses previos a la elección. La instrucción que recibió Bikas Joshi, el emisario designado por el Fondo, es clara: “hurgar, preguntar, advertir, pero nunca censurar”.
Este enfoque pragmático se traduce en una especie de “cheque en blanco” para el gobierno de Toto Caputo. Al evitar tensiones en el corto plazo, el FMI busca facilitar que el actual gobierno complete su ciclo antes de la llegada de nuevos actores políticos. Esto podría interpretarse como un alineamiento estratégico para favorecer a Milei en las urnas.
La política exterior de Milei: un juego de poder
En un contexto donde la política exterior se torna crucial, las relaciones entre Argentina y Estados Unidos se vuelven un eje central. La nueva administración busca establecer lo que han denominado “relaciones carnales” con Donald Trump, reviviendo viejas prácticas que muchos creían superadas. Esta estrategia ha suscitado críticas por su erraticidad, pero su objetivo es claro: garantizar un apoyo político y económico que podría resultar fundamental para la campaña de Milei.
El acercamiento a la Embajada de EE.UU., donde el Gabinete de Caputo celebró el Día de la Independencia estadounidense, es un indicativo de esta orientación. Aquí, se manifiesta el deseo de replicar el esquema que, en 2018, llevó a Mauricio Macri a lograr el respaldo de Trump en un contexto de crisis similar. Sin embargo, el tiempo dirá si esta táctica será tan efectiva como lo fue en el pasado.
La UIA y sus inquietudes
La Unión Industrial Argentina (UIA) ha manifestado su preocupación ante esta situación. La incertidumbre generada por un gobierno que busca alinearse más con intereses externos que internos pone en jaque la estabilidad del sector industrial. Las decisiones que se tomen en los próximos meses podrían tener un impacto significativo en la economía real y en el empleo.
Las inquietudes de la UIA se centran en varios puntos clave:
- Aumento de costos: Los industriales temen que la falta de correcciones en el programa económico solo prolongue la crisis inflacionaria.
- Inseguridad jurídica: La errática política exterior y el enfoque en relaciones unilaterales generan dudas sobre el futuro del comercio y la inversión.
- Expectativas de crecimiento: La industria necesita señales claras y coherentes para planear un horizonte de crecimiento sostenible.
Esta atmósfera de incertidumbre se ve acentuada por un contexto electoral que promete ser intenso y polarizado, donde el sector privado se encuentra en una encrucijada.
Un futuro incierto ante elecciones cruciales
Con la mirada puesta en octubre, la situación se complica. La intención de Milei de implementar cambios radicales podría tener un impacto inmediato en la economía argentina, y la flexibilidad del FMI podría jugar a favor o en contra de estos planes. A medida que se acercan las elecciones, las presiones internas y externas se intensifican, y cada decisión tomada en estos días puede tener consecuencias a largo plazo.
En este sentido, el FMI no solo actúa como un observador, sino que se convierte en un actor clave dentro de una trama política compleja. Las decisiones que tome el gobierno de Caputo, respaldadas por el silencio del Fondo, podrían ser decisivas para el futuro de Argentina. Sin embargo, más allá de la estrategia a corto plazo, subyace la interrogante: ¿hasta cuándo podrán sostenerse estas tácticas sin enfrentar las realidades económicas del país?