En otro gesto de alineamiento con Trump e Israel, Milei respaldó el ataque de Estados Unidos a Irán
Por María Gómez · 22 Jun 2025 – 06:55 PM -03 Ver perfil
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La geopolítica en la era Milei: un apoyo a la ofensiva de Estados Unidos en Medio Oriente
El reciente respaldo del presidente Javier Milei al ataque de Estados Unidos contra Irán ha encendido el debate sobre la política exterior argentina y su alineamiento con potencias extranjeras. Esta decisión, que se manifiesta a través de la celebración del empresario Marcos Galperin, no solo afecta las relaciones diplomáticas de Argentina, sino que también repercute en la percepción global del país en un contexto tan volátil como el actual.
Un respaldo controversial en tiempos de tensión
El ataque estadounidense contra las instalaciones nucleares iraníes, que se llevó a cabo el 13 de junio, ha generado múltiples reacciones a nivel internacional. En este escenario, el apoyo explícito de Milei a las acciones de su “amigo” Benjamín Netanyahu pone de relieve una política exterior que parece alinearse más con la administración de Donald Trump y el estado hebreo que con una postura de soberanía nacional. A través de sus declaraciones, Milei ha subrayado que “Irán es enemigo de Argentina”, un argumento que parece buscar una justificación moral a su decisión.
Este tipo de alineaciones no son nuevas. Desde su llegada al poder, Milei ha dejado claro que su visión del mundo está profundamente influenciada por las ideologías de la derecha estadounidense, lo que plantea serias preguntas sobre la independencia de la política exterior argentina. La prevalencia de estas amistades estratégicas podría, de hecho, tener un impacto directo en las relaciones comerciales y diplomáticas con otros países de la región, que podrían ver con recelo esta postura.
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La defensa de la civilización occidental
El discurso de Milei no se limita a una simple declaración de apoyo; también busca enmarcar el conflicto en un contexto más amplio, donde la defensa de la “civilización occidental” se convierte en un argumento central. Según el presidente, la intervención de Israel y Estados Unidos en este conflicto es vital para preservar los valores que, según él, son pilares de la cultura judeo-cristiana.
Este tipo de retórica, aunque puede resonar con ciertos sectores de la población, también es peligroso. La generalización de que un país entero es un enemigo por motivos ideológicos puede llevar a políticas que afecten no solo a la diplomacia, sino también a la seguridad y a las relaciones sociales en el ámbito local. En un momento donde el populismo y los extremismos están al alza, este tipo de discursos puede contribuir a una polarización aún mayor dentro de la sociedad argentina.
Implicaciones económicas y diplomáticas
Las acciones de Milei y su apoyo a las políticas estadounidenses tienen ramificaciones que van más allá de la retórica. Existen preocupaciones legítimas sobre cómo estas decisiones impactarán en el comercio y las inversiones extranjeras. A medida que Argentina busca salir de una crisis económica prolongada, el alineamiento con potencias que están involucradas en conflictos bélicos puede ser visto como un riesgo. Las tensiones geopolíticas pueden afectar la confianza de los inversores y, en consecuencia, las oportunidades de crecimiento para el país.
- Exportaciones a Irán: Argentina exportó aproximadamente $300 millones a Irán en el último año. Un conflicto abierto podría afectar estas relaciones comerciales.
- Inversión extranjera directa: Se estima que una política exterior agresiva podría reducir la inversión extranjera en un 15%.
- Turismo y relaciones culturales: Las tensiones con naciones como Irán pueden afectar el turismo y los intercambios culturales, que son vitales para una economía diversificada.
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Una polarización en aumento
Es innegable que el apoyo de Milei a la intervención militar de Estados Unidos en Irán ha creado una nueva polarización en la política argentina. Grupos de izquierda y defensores de los derechos humanos han expresado su oposición a esta postura, argumentando que el conflicto solo exacerbará las tensiones internacionales y aumentará el sufrimiento de las poblaciones civiles en la región. Las protestas no han tardado en surgir, mostrando un descontento creciente con un gobierno que se percibe como desinteresado en los efectos humanitarios de las acciones militares.
Así, en medio de un clima electoral donde la opinión pública juega un papel crucial, la postura de Milei podría tener un impacto significativo en su futuro político. Si bien algunos sectores lo apoyan, otros comienzan a cuestionar su capacidad para gobernar de manera efectiva en un mundo tan complejo.
