Por Juan Pérez · 25 Jul 2025 – 07:50 PM -03 Ver perfil

El arte de la convivencia y la asignación de roles en el hogar En la intimidad de nuestro hogar se tejen historias cotid... Descubre más sobre tejen, tácito,...

Foto: Lehtikuva | © 2025 InfoNow Noticias

El arte de la convivencia y la asignación de roles en el hogar

En la intimidad de nuestro hogar se tejen historias cotidianas que, aunque puedan parecer banales, reflejan las dinámicas de una sociedad en constante cambio. El protagonista de esta obra es, sin duda, el hogar mismo y los roles que se asignan dentro de él. Esta narrativa no solo afecta a quienes comparten un espacio, sino que también habla de las estructuras culturales que se perpetúan de generación en generación.

Tradiciones y modernidad en la división de tareas

La historia de mi familia es un reflejo de cómo la división del trabajo ha evolucionado a lo largo de los años. Mi abuelo paterno, que nunca supo hacerse un café, representa una época donde las habilidades domésticas eran raramente compartidas. En cambio, mi padre disfrutaba de un ritual casi sagrado al preparar su café, aunque nunca se aventuró más allá de esa tarea.

Hoy en día, soy el que se ocupa de la cocina, un rol que asumo con gusto, pero que también me desafía cuando la pausa entre tareas se vuelve un lujo. Este cambio en los roles de género dentro del hogar, aunque a menudo se percibe con un guiño de complicidad, también invita a la reflexión. La pregunta que surge es: ¿realmente hemos consensuado esta división o simplemente nos hemos acomodado a ella por inercia?

Los estereotipos en la relación doméstica

Los estereotipos de género no desaparecen fácilmente y, aunque en mi hogar se han redefinido, persisten en pequeñas aristas. Cuando hay que llevar el auto al taller, soy yo quien asume esa responsabilidad, a pesar de no tener un conocimiento profundo de mecánica. Este acto, casi instintivo, pone de manifiesto cómo algunas tareas se asignan en función de lo que se considera “natural” en un contexto de pareja.

Por otro lado, la llegada de un amigo con flores a casa a menudo lleva a que mi esposa elija el jarrón y coloque las flores. De nuevo, esta es una tarea que podría hacerse por cualquiera, pero parece que, en la práctica, se ha convertido en un terreno que ella maneja con gracia. No hay un contrato escrito, pero hay un entendimiento tácito que nos lleva a desempeñar roles que, en última instancia, reflejan no solo nuestras preferencias, sino también la cultura que los sustenta.

Riesgos y recompensas de la asunción de roles

La naturaleza de nuestra relación y la manera en que asumimos tareas también puede tener su lado negativo. Al caer en la trampa de los estereotipos, corremos el riesgo de perder de vista las habilidades del otro. Si bien es cierto que la estructura de nuestro hogar se ha adaptado a nuestras fortalezas, también es cierto que puede haber tareas que se desestiman por el simple hecho de que no “corresponden” a un género.

Además, esta asignación de roles puede causar malentendidos y tensiones. En ocasiones, mi esposa ha manifestado que le gustaría involucrarse más en la cocina, pero la dinámica ha establecido que yo soy el chef de la casa. Este tipo de situaciones puede llevar a una sensación de frustración o de no ser valorado en ciertas áreas, creando una dinámica que, sin querer, puede perpetuar el problema que pretendemos solucionar.

Mirando hacia el futuro, es evidente que la división del trabajo en el hogar está en constante evolución. La llegada de nuevas generaciones que desafían las normas tradicionales trae consigo la oportunidad de repensar cómo asignamos tareas y responsabilidades. La equidad en el hogar no se trata solo de repartir tareas, sino de fomentar un ambiente donde ambos se sientan empoderados para explorar y ejecutar diferentes roles.

En este sentido, es fundamental abrir un espacio para el diálogo, donde tanto hombres como mujeres puedan expresar sus deseos y habilidades sin temor a ser juzgados. En el contexto argentino, un país que atraviesa cambios políticos y sociales significativos, es relevante considerar cómo estas dinámicas en el hogar pueden reflejar una mayor transformación en la sociedad en general.

Autor

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *