Polémica medida de la federación de atletismo: las mujeres deberán someterse a una nueva prueba genética para competir
Por Ana Martínez · 31 Jul 2025 – 10:55 AM -03 Ver perfil
Crédito: Bloomberg – Imagen exclusiva | © 2025 InfoNow Noticias
Un nuevo capítulo en la regulación del deporte femenino
El mundo del atletismo se encuentra en un momento de gran controversia tras el anuncio de World Athletics sobre la implementación de una normativa que estipula que las atletas deberán someterse a una prueba genética para poder competir en la categoría femenina. Esta decisión, que se hará efectiva el 1 de septiembre, afectará a todas las competidoras que deseen participar en el próximo Mundial de Atletismo que se celebrará en Tokio entre el 13 y el 21 de septiembre. La medida ha generado debates en torno a la equidad, la ciencia y la identidad de género en el deporte.
La justificación detrás de la medida
El presidente de World Athletics, Sebastian Coe, defendió la decisión afirmando que su principal objetivo es “la protección y promoción de la integridad del deporte femenino”. La implementación de la prueba del gen SRY, que se considera un “indicador fiable” del sexo biológico, busca garantizar que las competidoras en la categoría femenina sean biológicamente mujeres. Esta postura, según Coe, es esencial para que las mujeres se sientan cómodas y confiadas al competir, sin temor a enfrentar un “techo de cristal biológico” que les impida alcanzar sus metas.
Es importante mencionar que, según Coe, la política de inclusión de género ha sido un tema debatido en el ámbito deportivo. Algunos argumentan que el reconocimiento de la identidad de género debe ser respetado, mientras otros sostienen que la biología debe primar en las competiciones de élite. Esta divergencia de opiniones pone de relieve la complejidad de la cuestión y su impacto en la percepción del deporte femenino.
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Implicaciones para las atletas
La implementación de esta prueba plantea diversas implicaciones para las atletas. En primer lugar, el proceso de testeo, que puede realizarse mediante un frotis bucal o análisis de sangre, podría ser visto por muchas como una invasión a su privacidad personal. Esto suscita interrogantes sobre hasta qué punto las organizaciones deportivas deberían tener acceso a información genética de los competidores, y cómo esto podría afectar la relación de confianza entre atletas y autoridades deportivas.
Además, el hecho de que se requiera una prueba genética podría generar un ambiente de presión y ansiedad entre las competidoras. Las atletas podrían sentir que su identidad y su valor como deportistas son cuestionados, lo que podría influir en su rendimiento y bienestar emocional. Esto es particularmente relevante en una época en que el deporte busca ser inclusivo y promover la diversidad, aspectos que parecen contradecir los objetivos de esta nueva medida.
Reacciones entre la comunidad deportiva
Las reacciones a la normativa han sido diversas. Por un lado, algunos grupos de defensa de los derechos de las mujeres en el deporte han expresado su apoyo a la medida, argumentando que es necesaria para proteger a las atletas biológicamente femeninas y garantizar un campo de juego justo. Por otro lado, activistas y defensores de los derechos LGBTQ+ han criticado la decisión, considerándola discriminatoria y excluyente. Este dilema entre la equidad y la inclusión es un reflejo de las tensiones actuales en la sociedad, donde el deporte no es ajeno a las discusiones sobre identidad de género y derechos humanos.
En este contexto, las voces de figuras influyentes del deporte, como Caster Semenya, quien ha estado en el centro de debates similares, son esenciales. Su lucha por ser reconocida en la categoría femenina, a pesar de sus diferencias biológicas, ilustra la complejidad del tema y el potencial impacto que estas políticas pueden tener en la vida de las atletas.
Imagen: AFP | Archivo | © 2025 InfoNow Noticias
El futuro del deporte femenino
Con la implementación de esta prueba genética, el futuro del deporte femenino se enfrenta a un punto de inflexión. La decisión de World Athletics podría sentar un precedente que afectará no solo el atletismo, sino también otras disciplinas deportivas. La comunidad deportiva en su conjunto se encuentra ante el desafío de hallar un equilibrio entre la inclusión y la integridad, un equilibrio que parece cada vez más difícil de alcanzar.
La pregunta que queda en el aire es cómo se traducirán estas medidas en la experiencia diaria de las atletas. La lucha por la igualdad de oportunidades en el deporte continúa, y en medio de esta controversia, es fundamental recordar que las historias de las atletas son, ante todo, historias de esfuerzo, dedicación y pasión por el deporte, más allá de las barreras que intenten imponer las reglas del juego.