Selección argentina. La alegría de la mamá del ‘Nano’ Troilo: “hablo dos palabritas y me emociono”

0

Una familia unida por el sueño de un hijo

La historia de la familia de Mariano Troilo, conocido también como el ‘Nano’, es un reflejo de esfuerzo y dedicación. En el contexto de su reciente convocatoria a la Selección argentina, esta familia se encuentra en el centro de una celebración llena de emociones. Tras años de sacrificios, entrenamientos y el apoyo incondicional de sus seres queridos, el momento que tanto esperaron finalmente ha llegado. La alegría en su hogar resuena en cada rincón, y Cintia Parejo, su madre, no puede contener la emoción al hablar de su hijo.

Una familia unida por el sueño de un hijo La historia de la familia de Mariano Troilo, conocido también como el 'Nano', ... Descubre más sobre incondicional,...

La emoción de una madre

En una reciente entrevista con el programa Última pregunta, emitido por Radio Continental Córdoba, Cintia compartió su felicidad y sorpresa ante la convocatoria de su hijo. “Hablo dos palabritas y ya me emociono, no lo puedo controlar”, confesó entre risas y lágrimas. Su reacción es un testimonio vivo de la conexión emocional que se establece entre una madre y su hijo en momentos de trascendencia.

El viaje de Mariano hacia el fútbol profesional no ha sido sencillo. Cintia recordó los sacrificios familiares: “Sus hermanos también sacrificaron muchas cosas, y nosotros nos dedicamos a llevarlo, a traerlo, a esperarlo en los entrenamientos, durmiendo en el auto muchas veces”. La familia, unida en su propósito, ha enfrentado innumerables desafíos, siempre con una sonrisa y un aliento constante.

El camino hacia la selección

La trayectoria de Mariano Troilo en el fútbol ha sido marcada por un compromiso inquebrantable. Desde sus primeros pasos en el fútbol infantil hasta su ingreso a la Primera de Belgrano, cada etapa fue un peldaño que lo acercó a su sueño. La familia ha sido un pilar fundamental en este proceso, apoyándolo en cada entrenamiento y cada partido, mostrando un amor que va más allá de lo deportivo.

“La verdad fue una gran sorpresa”, comentó Cintia al hablar sobre la llamada que recibió en la que le anunciaron la selección de su hijo. Este momento no solo representa un triunfo personal para Mariano, sino que también simboliza la culminación de un esfuerzo familiar que ha perdurado a lo largo de los años. La llegada a la Selección argentina es un hito que trasciende lo individual y se convierte en un triunfo colectivo.

Incendios en Córdoba, trabajo de bomberos

Un abrazo virtual lleno de significado

La tecnología ha permitido que la familia de Mariano pueda sentir su presencia, incluso a la distancia. El domingo, la familia tuvo una videollamada con él, ya en el predio de la AFA. Este encuentro virtual se convirtió en un abrazo simbólico que capturó la esencia de su amor y apoyo incondicional. Cintia describió ese momento como “una alegría que no imaginábamos, ya era un orgullo que él llegara a la Primera de Belgrano, esto cambió toda la expectativa, no sé cómo definirlo en palabras”.

La conexión familiar se fortalece en la distancia, y la emoción de Cintia resuena como un eco de la esperanza y la fe que han mantenido viva en su hogar. Este tipo de experiencias son las que unen a las familias, creando recuerdos imborrables que permanecerán en la memoria colectiva.

Más que un sueño: un legado familiar

El caso de Mariano Troilo es emblemático no solo por su ascenso en el deporte, sino también por el legado que representa. Cada sacrificio, cada noche en vela y cada esfuerzo realizado por su familia se entrelazan para formar una historia que inspira. Cintia, con una voz llena de orgullo, enfatiza el papel de la familia en la vida de su hijo: “Siempre con alegría de acompañarlo”.

La historia del ‘Nano’ es un recordatorio de que detrás de cada atleta hay un grupo de personas que hacen posible su éxito. En un mundo donde a menudo se glorifica el talento individual, es fundamental reconocer la importancia de la red de apoyo que sustenta ese talento. La historia de Mariano Troilo es un ejemplo de cómo el amor familiar puede ser el motor que impulsa a una persona hacia la grandeza.

Autor

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *