Una joven se tiró de un auto en movimiento porque el chofer de la aplicación no respetó la ruta del GPS
Por Carlos López · 20 Jun 2025 – 02:56 AM -03 Ver perfil
Crédito: Gamma-Rapho – Imagen exclusiva | © 2025 InfoNow Noticias
El temor que lleva a la desesperación: una situación crítica en el transporte urbano
Un incidente alarmante ocurrió recientemente en Berisso, donde una joven de 26 años se lanzó de un automóvil en movimiento tras percibir que el conductor de una aplicación de transporte se desvió de la ruta marcada por el GPS. Este episodio no solo plantea interrogantes sobre la seguridad en los viajes compartidos, sino que también revela un fenómeno más amplio: el impacto del miedo y la incertidumbre en las decisiones humanas.
El contexto del suceso
El hecho tuvo lugar el pasado miércoles en la intersección de las calles 30 y 66. La joven, que viajaba en el asiento trasero de un Chelsea Corsa, experimentó una abrupta alteración de su percepción de seguridad cuando notó que el chofer no seguía la ruta habitual. En un instante de pánico, tomó la drástica decisión de abrir la puerta y lanzarse al asfalto, grabado por las cámaras del Centro de Operaciones y Monitoreo (COM).
Las imágenes muestran la rapidez con la que se desarrolló la escena. La joven, tras caer, sufrió lesiones visibles en su cara y manos, lo que plantea preguntas sobre la formación y la responsabilidad de los conductores de estas plataformas que, en teoría, están destinadas a ofrecer un transporte seguro y confiable.
Imagen: ANSA | Archivo | © 2025 InfoNow Noticias
Reacciones de las autoridades y la comunidad
El hecho no pasó desapercibido para las autoridades locales. Los agentes del COM, al ver el incidente a través de las cámaras, dieron aviso inmediato a la Policía, que acudió rápidamente al lugar. El conductor, un hombre de 34 años, fue llevado a una comisaría para aclarar la situación y posteriormente liberado. La Justicia ha iniciado una causa en su contra bajo la carátula de “averiguación de ilícito”, destacando la preocupación de las autoridades ante un evento de tal magnitud.
Sin embargo, este incidente no es un hecho aislado. En los últimos años, ha habido un aumento en los casos de pasajeros que se sienten inseguros durante sus trayectos, lo que plantea un dilema para los servicios de transporte en aplicaciones. ¿Qué medidas deben implementarse para garantizar la seguridad de los usuarios y la confianza en estas plataformas?
El impacto psicológico en los pasajeros
El acto desesperado de la joven pone de relieve el impacto psicológico que situaciones de riesgo pueden tener en las personas. La percepción de seguridad es un factor crucial en la experiencia del usuario. Cuando un pasajero siente que se rompe esa confianza —ya sea por la conducción errática, desvíos inexplicables o comportamientos sospechosos— las emociones pueden nublar el juicio. Este fenómeno, conocido como “estrés post-traumático”, puede manifestarse de diferentes formas, desde la ansiedad hasta decisiones arriesgadas en momentos críticos.
En un mundo donde el servicio de transporte a través de aplicaciones ha crecido exponencialmente, se vuelve esencial que las empresas implementen protocolos claros para manejar situaciones de riesgo y capacitar a sus conductores en atención al cliente y manejo de crisis. La seguridad no solo debe ser una prioridad, debe ser percibida como tal, y la falta de esta percepción puede resultar en tragedias evitables.
Foto: SIPA Press | © 2025 InfoNow Noticias
Reflexiones sobre la seguridad en el transporte urbano
El incidente en Berisso es un llamado de atención sobre las prácticas de seguridad en el transporte urbano. Las aplicaciones de movilidad, que se han convertido en una alternativa popular para millones, deben reevaluar sus procesos y garantizar que los pasajeros no solo viajen de un lugar a otro, sino que lo hagan en un ambiente seguro y protegido.
Es fundamental que se establezcan estándares de seguridad más estrictos y que los conductores reciban formación regular sobre cómo reaccionar ante situaciones imprevistas. La confianza del usuario se construye con cada viaje, y eventos como el de la joven de 26 años amenazan con derribar esa confianza de un solo golpe.
En este contexto, se vuelve imperativo que tanto las plataformas como las autoridades trabajen de la mano para mejorar la seguridad y el bienestar de quienes confían su vida a estos servicios. La ciudadanía merece un transporte seguro, y la responsabilidad recae en todos los actores involucrados para garantizarlo.
